Istaravshan – Ciudad Milenaria Donde Canta el Martillo y Susurra el Zoco
Al pie de las montañas del Turkestán, donde la tierra fértil se encuentra con el alma de la estepa, vive Istaravshan — una de las ciudades más antiguas de Tayikistán. Más de 2.500 años susurran entre sus piedras, sus talleres, sus mercados.
Antiguamente llamada Cyropolis, en honor a Ciro el Grande, esta ciudad es forja, verso, historia, y luz. Aquí el pasado no se guarda, se respira.
Es tierra de artesanos. Los herreros golpean el hierro como si compusieran canciones, los orfebres dibujan la belleza, y los tejedores entrelazan memoria con hilo.
Desde la cima, la fortaleza de Mugh-Kala contempla en silencio. Abajo, el bazar vibra: alfombras, frutas, metales, aromas, lenguas, risas.
El mausoleo de Hazrati Shoh invita a la calma, y la mezquita de Sari Mazor reza con madera y cielo.
Pero esta ciudad no es reliquia. Late. Crece. Se mueve. Construye nuevas calles, escuelas, esperanzas. El tiempo aquí camina con respeto.
Los veranos son cálidos, los inviernos frescos, pero el verdadero calor viene del alma de su gente.
Istaravshan no corre. Espera, comparte, crea, cree.
Es una ciudad que sabe mirar atrás y avanzar sin perderse.